¿Te casas y no sabes por dónde empezar? ¡No te preocupes! Es normal que estés un poco perdida pero con estos sencillos consejos vas a saber qué hacer con la planificación de tu boda.
Foto The Ro Wedding Photo
Aunque casarse parezca una tendencia a la baja, son muchos los que se embarcan en la tarea de organizar una boda y que afrontan los meses de compromiso con gran ilusión. Ha llegado el momento de poner fecha, ahora sí que sí, empieza la cuenta atrás hacia el día de tu boda. Posiblemente tengas algunas cosas claras, otras aún no; las tareas se agolpan en tu cabeza y es necesario planificarse para no caer en un estado de ansiedad que transforme los meses previos a la boda en un sin vivir. Hay muchas opciones y decisiones que tomar así que empecemos por el principio.
Existen agendas, directorios, apps de bodas y guías para ayudarte a planificar la boda; son muy genéricas pero son un apoyo estupendo si estás muy perdida. La otra opción es seguir con las indicaciones que te propongo… Estos son los primeros pasos:
1. Elegir la fecha de la boda
Empieza por elegir la época del año y fecha en la que te quieres casar. Si con la fecha no eres flexible no hay tiempo que perder, si tienes claro dónde quieres celebrar tu boda, también debes consultar con la iglesia o finca su disponibilidad. Ahora se celebran bodas durante todo el año porque cada estación tiene distintas ventajas respecto al clima, decoración, disponibilidad o descuentos… valora todas las opciones antes de decidir.
Foto Dile que Sí
2. Elabora la lista de invitados
Tras la pandemia, se inició una tendencia hacia bodas más íntimas, pero el número de invitados, más que una moda, es un aspecto clave a la hora de definir y repartir el presupuesto; así que piensa bien quién no puede faltar en tu boda ya que es un día muy importante y querrás estar rodeado de caras conocidas que celebren vuestra unión. El tamaño de la boda condicionará ese presupuesto ya que la partida más importante es la asociada al catering y... palabrita de wedding planner: "lo primero es que se coma y se beba bien, en España somos así de sencillos y una buena celebración pasa por disfrutar de la gastronomía; hay más factores que harán de la boda un éxito, pero lo primero es lo primero".
3. Elegir lugar de celebración
Si tienes un presupuesto aproximado es hora de escoger el lugar de celebración. Hay una oferta muy amplia y dar con el lugar perfecto para el tipo de boda que quieras celebrar, vuestros gustos, tamaño de la boda y presupuesto, puede llevar mucho tiempo. Siempre puedes contar con la ayuda profesional de una wedding planner o estar atenta a nuestro blog porque pronto te contaremos cómo elegir el lugar perfecto.
Foto Esif
4. Primeros proveedores y trámites
En este punto muchas parejas se relajan pero es el momento de elegir qué proveedores quieres que te acompañen ese día: fotografía y vídeo, maquillaje y peluquería, música y DJ, vestido de novia, tocado, ramo… mi consejo es ir poco a poco, buscando coherencia de estilo y profesionales con los que a priori tengas buenas sensaciones. Si optaste por la ayuda de una wedding planner, te guiará durante todo el proceso y buscará los profesionales que mejor encajen con tu estilo y presupuesto.
Lo importante es contar con gente profesional, que ese día desempeñe su trabajo con puntualidad, calidad y pasión por lo que hace. En definitiva, es fundamental contar con profesionales que acrediten su trabajo y que te trasmitan la confianza y tranquilidad que ese día necesitas.
Ya sea una boda civil o religiosa, es necesario llevar a cabo una serie de trámites para formalizar la unión y que implican unos plazos, lo mejor es informarse directamente en el sitio donde queramos casarnos. Tanto si quieres casarte ante notario, como si quieres redactar unas capitulaciones matrimoniales, y muchos trámites más, es necesario hacerlo con antelación para que los plazos no sumen estrés a los preparativos. Y por supuesto, no te olvides de la puesta a punto: cualquier tratamiento de belleza previo a la boda que queramos llevar a cabo hay que planificarlo con el profesional correspondiente.
Organizar una boda es algo especial, pero también puede ser intenso y es necesario hacer “descansos” y disfrutar de tiempo en pareja para no acabar saturado.
Foto Álvaro Sancha
5. Ventajas de casarse frente a “juntarse”
Existen una serie de beneficios legales que puedes leer aquí, pero más allá de temas prácticos o fiscales, casarse aporta a la pareja solidez, un proyecto común y un recuerdo inolvidable, porque el día de tu boda sin duda lo será. Además será la excusa perfecta para poder hacer algo especial cada año en esa fecha.
En primer lugar, es importante saber que el matrimonio es un contrato que se inscribe en el Registro Civil, independientemente del tipo de celebración (civil o por la iglesia), pues genera los mismos efectos para los cónyuges y para los hijos de la pareja en caso de tenerlos.
Cuando dos personas viven en común sin estar casados, aunque tengan hijos, no se realiza el vínculo que otorga derechos al cónyuge, sino que estos extremos son más difíciles de conseguir porque hay que cumplir unos requisitos de convivencia y tiempo. En este caso, hablamos de derechos como la pensión de viudedad, la declaración de la renta o el derecho a la herencia cuando la pareja fallece sin testamento.
Entre las ventajas tributarias que tenemos al estar casados, encontramos la posibilidad de tributación conjunta en el IRPF. Este régimen de tributación es muy atractivo cuando los cónyuges tienen hijos o uno de ellos no trabaja. Además, existe la deducción por tributación conjunta. Seguidamente, el matrimonio permite la herencia por fallecimiento de uno de los cónyuges. Por otro lado: el impuesto de sucesiones, que depende de la región en la que se halle la familia, por el que cónyuges e hijos pueden disfrutar de bonificaciones en el impuesto. Asimismo, la pensión de viudedad la puede solicitar el cónyuge casado sin tener que demostrar ningún otro requisito. En cuanto a los derechos de los hijos, existen menos diferencias. Aunque la pareja no esté casada, los hijos van a tener los mismos derechos.
Y si tienes más dudas, no te pierdas nuestro servicio de Wedding Coach para contar con un extra de tranquilidad a medida que avanzan tus preparativos.
Gracias como siempre a los estupendos fotógrafos que acompañan este post.
Besitos.
Anais M.